lunes, 3 de septiembre de 2012

Esperando Parir

Tengo 39+5 semanas de embarazo. Desde la semana 35 que estoy con contracciones y una actividad uterina alterada. Del miedo a tener una bebe prematura he pasado a la completa ansiedad porque aún no nace, porque pasan las horas, los días y el trabajo de parto no comienza nunca.

Hace meses atrás decidí que esta vez quería un parto lo más natural posible dentro de una clínica, con poca anestesia, consciente y participativa. Que quería parir, yo, no ser una "paciente", un ser pasivo en mi propio parto.

Lo fui en mi primer parto y lo odie. Aguante todo en silencio, sin cuestionar, sin alegar, porque "así es la cosa no más". Pero después despertó una leona en mí y me di cuenta de que la "cosa" es como yo quiera.

Y ahora, tras leer una maravillosa entrevista a la actriz Paz Bascuñan, donde relata experiencias muy similares a las mías, recojo una frase que me marco: "cuando perdí el miedo, ahí nació mi hija".

Tengo miedo. Mucho miedo. Miedo al caos, al colapso, al parto, a como va a reaccionar mi hija mayor, de tan solo 1,9 añitos a la llegada de su hermanita. Tengo miedo a volver a pasarlo lo mal que lo pase cuando fui madre por primera vez. Miedo a volver a pelear con esa intensidad y esa violencia con mi marido. Miedo a no poder, a fracasar. Miedo, miedo intenso y paralizante. Miedo que no me ha dejado parir.

Tengo que deshacerme del miedo, ara que mi hija pueda nacer. Ahora lo entiendo, ahora lo veo claro. Tengo que entregarme a la vida, confiar en mi sabiduría interna, en esa mujer salvaje que habita en mi y que sabe perfectamente que hacer... El único problema es que no se como dar el paso.